INTOLERANCIA A LA LACTOSA
La intolerancia a la lactosa se trata de una capacidad reducida de escindir (separar) el azúcar de la leche (lactosa) en el intestino (ingestion). A nivel mundial es bastante común.
La leche y los lácteos contienen diferentes cantidades de lactosa: de hecho muchos productos se pueden tomar por los que tienen intolerancia a la lactosa. Es muy importante tener lácteos como parte de la alimentación para obtener suficiente calcio. Los lácteos también son una excelente fuente proteica, de yodo y algunas vitaminas B. Hoy en día hay varios productos sin lactosa, o con un nivel de lactosa reducida, disponible en las tiendas.
La leche es el único producto “natural” que tiene lactosa. La lactosa contiene dos moléculas de azúcar juntadas con un tipo de enlace: para romper este enlace hace falta una enzima que se llama lactasa. En la mayoría de las personas esta enzima desaparece parcial o totalmente al dejar de tomar el pecho cuando son niños.
Algunos pueblos, por ejemplo los noruegos étnicos, mantienen esta enzima toda la vida, por lo que también pueden tomar lactosa toda la vida sin molestias. Seguramente la tolerancia a la leche y otros lácteos ha dado alguna ventaja de supervivencia en ciertas zonas del mundo, lo cual puede explicar por qué Noruega tiene la menor aparición de intolerancia de lactosa en el mundo (2 - 4% de la población).
Incómodo, pero no peligroso
La intolerancia a la lactosa no es peligrosa, aunque puede ser muy incómoda si la alimentación no se adapta. La intolerancia a la lactosa hace que la lactosa que no se escinde (separa) en el intestino delgado pasa directamente al colon y se descompone por las bacterias que existen ahi: este proceso normalmente crea gases y diarrea. Con una diarrea el organismo puede perder mucho liquido y es fácil acabar deshidratado. Otros síntomas como estreñimiento, vomito, náusea, dolor de cabeza, dolor de articulaciones y músculos también es común en personas con intolerancia a la lactosa.
La mayoría de las personas pueden tomar un poco
Una persona con intolerancia a lactosa normalmente puede tomar algo de comida que tenga lactosa, aunque es muy individual la cantidad que tolera cada uno antes de provocar síntomas. Se suele tolerar mejor lactosa ingerida a través de una comida general en comparación a cuando no se mezcla con otros alimentos. También se suele tolerar una mayor cantidad de lactosa si no se ingiere todo a la vez, sino en varias tomas a lo largo del día.
Puede ser transitorio
Personas que habitualmente toman y toleran la lactosa pueden tener una intolerancia durante periodos cortos. Puede ser una consecuencia de daño al intestino, por ejemplo en casos de enfermadas celíacas (intolerancia al gluten), una infección en el intestino o tras diarrea prolongada. Esta intolerancia a la lactosa secundaria normalmente pasa cuando el intestino vuelve a la normalidad.
Leche y lácteos sin lactosa
Como alternativa a productos con lactosa, hoy en día hay varios productos sin lactosa o con niveles de lactosa reducidas. También hay varios productos (yoghurt, bebidas, helado, nata..) que pueden ser reemplazadas por soja, arroz y/o avena que no tienen lactosa. Algunos de estos productos tienen calcio, vitamina B2 y B12 añadido y se puede tomar para compensar lácteos normales. Los productos que no tienen calcio añadido no son opciones adecuadas.
Intenta no eliminar los productos lácteos. Con intolerancia a la lactosa es importante limitar la ingesta de lactosa en la alimentación, pero en raras ocasiones hace falta eliminarlo totalmente ya que la mayoría de las personas pueden escindir algo de lactosa en el intestino. Es importante “probar y fallar” hasta encontrar su propio nivel de tolerancia.
Para la mayoría de productos con un nivel reducido de lactosa, mantequilla y margarina son productos no problemáticos. Productos agrios (por ejemplo yoghurt) contienen un cultivo bacteriano que ayuda a escindir la lactosa. La mayoría de las personas con intolerancia a la lactosa pueden tolerar medio vaso de yoghurt y/o 1 dl de leche.
Ingredientes lácteos suelen formar parte de muchos productos, así que es importante leer el listado de ingredientes. La cantidad que contiene cada producto suele estar listado en orden descendente. Cuando el contenido lácteo está mencionado entre los primeros ingredientes (por ejemplo: leche, leche desnatada en polvo, lactosa, nata agria, nata, suero, leche en polvo…) es posible que no se tolera el producto. Si el ingrediente aparece más abajo en el listado hay menos probabilidad de intolerancia al producto.
Es importante incluir algunos productos lácteos en la alimentación, la ingesta de calcio puede ser demasiado bajo si se elimina la ingesta de todos los productos lácteos. Ingerir 3 unidades de productos lácteos al día (una unidad puede ser 1 vaso de leche, un yoghurt o una rebanada de queso en un sandwich) normalmente asegura cubrir la necesidad de calcio en la mayoría de las personas. Para gente deportista los productos lácteos son una fuente importante para obtener energía y proteína de alta calidad.
Ayudas para intolerantes a la lactosa
Recibir una invitación para ir a comer o cenar puede ser problemático para alguien con intolerancia alimenticia. Es importante saber que la intolerancia a la lactosa tiene una fácil solución que se puede comprar: en la farmacia puedes encontrar varias marcas ofreciendo productos de enzimas, lactasa, que ayuda a escindir la lactosa en los productos lácteos. Lee las instrucciones para saber cómo tomarlo ya que varia entre cada producto.